lunes, 5 de diciembre de 2011

DICIEMBRE... LOS SEMENTALES ( II )



Llegó Diciembre y hoy día 5 en Encina Hermosa desde muy temprano el sonido de los cencerros envueltos en la densa niebla se escuchan por doquier, tres de los sementales serán conducidos a sus lotes de vacas.
El número 17 PANDERETO, el número 26 ESPAÑOL, y el número 35 PAÑERO, están dispuestos para ser trasladados desde su cercado habitual al de las vacas asignadas en su lote.
Pandereto pacía sosegadamente en el campo, con el cuerno derecho acariciando la reciente hierba.
Español al oír la puerta levantó la cabeza. La agitó como un perro sacudiéndose el agua, después comenzó a moverse a través del cercado como adivinando el momento.
Pañero, estaba en un alto entre una hilera de alcornoques, los tres están en esta cerca desde Junio último que se retiraron a las vacas y permanecen allí junto al resto de sementales.
En el momento de hacer su aparición los caballos, por encina de los jinetes pasaron un bando grande de patos, con el ruido del sonido de los cencerros de los cabestros giraron violentamente perdiéndose en el espacio a gran velocidad.
Poco a poco los tres sementales forzados por los vaqueros se fueron juntando en dirección a la puerta de salida, abandonaban así su "martirio" de varios meses, y lo hacían con rapidez ellos solos sin forzarlos, galopaban alegremente, como decía D. Alvaro Domecq había llegado " el día del amor de los toros ".
Después de andar por la dehesa llegaron a la cerca del primer lote de vacas asignadas a Pandereto.
Pandereto entró con imponente majestuosidad, recorrió su harén, paso a paso, lentamente, acercándose una a una a todas las vacas en una visita de cortesía, como avisándolas que él estaba allí.
Tres vacas que comían hierba y bellotas levantaron sus cabezas para conocer al semental, que las acarició suavemente con su hocico y se marchó con sus quinientos y muchos kilos de peso a seguir pasando revista a su tropa.
Una utrera respiró profundamente, dio un paso hacia adelante y agitó los pitones entre la niebla de la mañana. El sol luchaba con la niebla sin conseguir resultados.
El sonido de los caballos, de los cencerros y los vaqueros gritando si iba alejando y Pandereto una vez concluida su revista, se puso a comer en una ladera.
Al momento, se repite la escena, Español lo acaban de introducir en su nueva cerca junto a su lote de vacas.
Transcurrió algún tiempo andando Español por la cerca y al fin encontró a todas las vacas reunidas. Es un cañado con abundancia de grama. Algunas al verlo venir trotaron nerviosamente refregando los lomos contra los alambres mohosos de la cerca ; otras, paradas lo miraban con cierta curiosidad.
El sol que al fin había vencido a la niebla levantaba lentamente sus rayos entre las ramas de las encinas recién podadas. Se escuchó un bramido que hizo que algunas de las vacas excitadas levantaron las cabezas agitando los pitones al aire. El ritmo de la llamada era lento y espaciado, como los rugidos de un león saludando al sol de la mañana. Cuando terminó de bramar, algunas de las vacas se adelantaron para husmearlo, se volvió hacía una de ellas la tocó con la cabeza y la siguió con mucha majestuosidad.
Pañero, por fin llegó a su ansiada cerca el pelo le brillaba al sol y el rabo le arrastraba mojado todavía de la niebla. El pecho sólido, rematado, con un gran morrillo.
Tendrá que pasar alguna semana para que las vacas se acostumbren a tener al semental entre ellas.
El macho produce unas substancias llamadas " feromonas " que despiden un olor característico y que favorece por tanto el desencadenamiento de la actividad sexual de las hembras.
A medida que avanzaba por la cerca Pañero lentamente, levantaba la cabeza para buscar en el aire el olor de las vacas, los cables y tiras de sus músculos se ondulaban bajo su piel.
El espacio abierto terminó, la arboleda se hizo más espesa y por fin encontró al grueso de las vacas.
Entonces el oscuro músculo de su morrillo comenzó a dilatarse y a la vez se golpeaba suavemente los flancos con su larga cola.
Miró durante un largo rato hasta que al ver a una vaca moverse la siguió arrogante a través de los alcornoques.
Según andaba tras la vaca al pasar junto a la charca espantó a una cigüeña que cazaba ranas, se puso a beber en el momento que otra vaca llegaba a lo mismo, Pañero intentó acariciar a la vaca que se volvió bruscamente golpeando con sus pitones a Pañero. El simplemente se apartó resignado y siguió su camino.

Esta labor está concluida. El próximo 5 de Enero, recogerán a estos tres sementales y traerán a otros tres con el fin de rotarlos, así hasta el 30 de Junio, las vacas estarán siempre acompañadas de un semental.
Si dos o más vacas se están peleando el semental las separa sin contemplaciones.
El toro come primero y luego brama llamando así a la vaca para que se coma lo que a él le sobra.








1 comentario:

  1. COMO SIEMPRE MAGNIFICO. Me encanta leerle por su gran sencillez. Saludos y respetos de un paisano @pecasmar

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