El auge del toreo llevó a la Real Maestranza de Caballería de Ronda a eregir su famosa plaza, obra que se atribuye a Martín de Aldehuela, el mismo arquitecto del Puente Nuevo sobre el Tajo de Ronda.
La Plaza nace, pues, cuando el toreo a pie se ha impuesto sobre el caballeresco.
La construcción de la plaza duró seis años, y fué inagurada el 19 de mayo de 1785 con una corrida de toros en la que actuaron Pedro Romero y José Delgado " Pepe Hillo ", con seis chulos, entre los que estaban dos hermanos de Pedro Romero, José y Antonio.
Los toros eran de José Cabrera, del Conde de Vistahermosa y del Campo de Tarifa.
El día que Ronda inagura su plaza de piedra en sus extramuros, al otro lado del Tajo, invita para el evento al más famoso de los toreros sevillanos " Pepe Hillo ", para que de esta manera estén represantados las dos cunas del toreo en tal acontecimiento : la rondeña, que dio excepcional vida al toreo dotándole de una noble y cendeña reciedumbre, y la sevillana, que hizo lo propio, cediéndole el ángel, la gracia y el duende incluso el embrujo de su tierra. Dos escuelas, dos conceptos, o polos opuestos donde siempre se miró la torería, bien para alimentarse con lo bello de la pureza, ó con la pureza de lo bello.
Ronda y su plaza, - la de los toreros machos -, como la cantó Fernando Villalón.
En sus treinta y cinco aniversario, concretamente el 21 de mayo de 1820, en el mom,ento de entrar a matar, un espectador le gritó al matador sevillano " Curro Guillén ", si es usted valiente, recíbalo, señor Guillén ; y en esta suerte, el matador fué herido de una terrible cornada muriendo casí al instante, sus restos fueron enterrados bajo el mismo albero que horas antes había sido regado con su sangre.
Pedro Romero intercedió ante los nobles maestrantes para que así se hiciera.
Concebida en piedra areñisca con un esquema monumental, la nobleza de su traza arquitectónica, con su doble galería de arcadas y la ausencia de tendidos al descubierto, tiene más espíritu de clausto que de recinto para espectáculos, y recuerda al patio circular del famoso palacio de Carlos V en la Alhambra de Granada.
Su ruedo de 66 metros de diámetro esta considerado como el más amplio del mundo y está circundado por un callejón formado por dos anillos de piedra. Los tendidos tienen cinco filas de gradas, de dos pisos, con 136 columnas formando 68 arcos de columnas toscanas, salvo la del Palco Real.
Cubierta con tejado a dos aguas de teja árabe, la elegancia de su interior no tiene igual en ninguna otra plaza de toros.
El primer documento escrito que existe sobre el proyecto de edificar la Plaza de la Real Maestranza de Caballería aparece en los archivos, de fecha 19 de julio de 1765 en la que consta que dicho día la ciudad concedió el sitio para construir dicha plaza en el llano de la Merced.
La puerta principal de la plaza de toros de Ronda fue trasladada, en 1923, a su emplazamiento definitivo en la calle San Carlos, hoy Virgen de la Paz.
Destaca también la rejería del balcón, obra de artistas rondeños.
La Plaza de toros de Ronda por su historia y su arquitectura, por su carácter y belleza está reconocida como una de las más antiguas de España y una de las más monumentales que existen.
Cuando en el siglo XVIII los toreros de a pie toman el relevo de los caballeros en los juegos con el toro, surge en Ronda la familia de los Romero, que durante tres generaciones reúne a los toreros más singulares de la época. Entre ellos destacó sobre todo Pedro Romero ( 1754- 1839 ), figura cumbre y la más representativa de la Tauromaquia.
Su personalidad consiguió que su oficio alcanzara dignidad social y respeto, al reunir valor, destreza, y sentido estético.
Una segunda dinastía de toreros rondeños, los Ordóñez, constituye otra aportación de Ronda a la historia de la Tauromaquia. Cayetano Ordóñez y su hijo Antonio Ordóñez despertaron, por su manera de concebir el toreo, el interés de personajes tan ilustres como Orson Wells y Ernest Hemingway.
Fué precisamente Antonio Ordóñez quien en 1954 creó la mundialmente conocida corrida goyesca, donde el exorno y la vestimenta nos traslada a la época del pintor Goya.
Plaza de toros de Ronda,
la de los toreros machos ;
pide tu balconería
una Carmen cada palco,
un Romero cada toro,
un maestrante a caballo
y dos bandidos que pidan
la llave con sus retacos.
Plaza de toros de Ronda,
la de los toreros machos.
De Sevilla era el aire
de Ronda el fuego :
y los dos se juntaron
en el toreo.
El arte del toreo
fué maravilla
porque lo hicieron juntos
Ronda y Sevilla.
Unieron dos verdades
en una sola
con Illo y con Romero
Sevilla y Ronda.
Hoy este viejo albero, comtemplado por columnas y arquerías que soportan el peso de cuarenta y cinco lustros de historia y viejas tauromaquias y esa estela, de seco aroma que en el tiempo han dejado el arte de sus toreros.
En su interior se puede visitar el museo taurino, la Real Guarnicionería de la casa Orleans y la Colección de armas de fuego antiguas.
( Continuará )
He visitado varias veces esta plaza impresionante. En la última ocasión recuerdo que me aparté del grupo que me acompañaba y lejos de la algarabía de los niños y ajeno al calor que azotaba a mis amigos, me empujó la necesidad de salir al tercio y allí, sobre ese albero, en silencio, sentí como en ninguna otra plaza lo que con tan hermosas palabras explica en esta entrada: "... el peso de cuarenta y cinco lustros de historia y viejas tauromaquias y esa estela, de seco aroma que en el tiempo han dejado el arte de sus toreros..."
ResponderEliminarFue extraño. Sentí envidia hacia quienes han podido torear ahí y a la vez el alivio de no haberme visto en semejante compromiso.
Sentí como me invadía un enorme deseo de torear y rápidamente me marché.
Es un sitio con un magnetismo verdaderamente especial. Espero con ilusión los capítulos de esta nueva serie que apunta magnífica.
Un abrazo.
Que bonitas palabras amigo, torear en ese albero es especial, ese marco, esa joya, ese monumento vivo a la Historia de la Tauromaquia... me emociono.
EliminarFelipe Romero :
EliminarMagnifica la exposición que haces en tu comentario de la Plaza de Ronda, coincidiendo con mi exposición que tiene más de espirítu de clausto que de celebración de espectáculos. Espero te guste la serie. Muchas gracias y un abrazo.
La plaza más bella del Mundo !!!
ResponderEliminarAoónimo :
EliminarContesto a los tres comentarios :
Coincido plenamente con los mismos y espero que como rondeño le guste el resto de los capítulos. Los que no conozcan la Plaza de Ronda que hagan un esfuerzo y la visiten, de verdad merece la pena. Saludos.
Cada vez que entro en la Maestranza Rondeña, uno se emociona, y ya en una corrida, cuando veo el paseillo se me saltan las lágrimas, mucho peso e historia en ese marco y ese albero mágico, que te lleva al cielo. Que orgullo haber nacido en Ronda, la Cuna del Toreo.
ResponderEliminar