El día 26 de Febrero de 2011, coincidiendo con el 1º Curso de Aficionados Prácticos, celebraremos en Encina Hermosa el primer tentadero de este año.
Para todos es sabido que en las plazas de tienta se prueba la bravura de las becerras contra la puya del picador y una segunda calidad, busca el ganadero la nobleza, frente a la muleta del torero actuante.
Nobleza y bravura son similares, juntas forman la esencia que el ganadero busca en el tentadero.
Una becerra noble embiste a la muleta cuando ésta se mueve, unas aprenden con más lentitud que otras, pero si el torero que tienta trata de realizarlo todo perfecto encontrará que la becerra va de menos a más y disfrutará él y todos los asistentes al tentadero.
Todas las becerras no son igualmente bravas ni igualmente nobles, los ganaderos realizamos los tentaderos escrupulosamente buscando estas características si las encontramos la becerra permanecerá en la ganadería, por el contrario si la nota no justifica su permanencia, se manda al matadero.
Algunas vacas son tan bravas que una vez se abre la puerta para que abandonen la plaza, no quieren salir, se sacan toreándolas hasta el campo inmediato y se quedan en la puerta de la plaza pidiendo pelea.
Las becerras que no pasan la prueba, no es porque les falte bravura, es por la exigencia de la tienta. En la tienta todo se califica anotando y sopesando, y, así termina la prueba.
Cuando una becerra entre en la plaza, recién sacada del corral, de la seguridad del resto de sus hermanas, de pronto se encuentra en el ruedo con el caballo del picador. Sola se siente en peligro, y empieza a embestir al torero y al caballo.
La puya que se usa para las becerras, hace sangre, en invierno no hace falta curarlas, pero cuando hace calor si no se hace con las moscas crían cocos y luego cuesta curar.
Lo que más se valora es que la becerra vaya al caballo por derecho, con buen son, buscando la pelea, con fijeza, que no escarbe y que empuje todo lo que pueda metiendo los riñones, eso es lo que pretendemos todos los ganaderos en el examen.
Las faenas de muleta en los tentaderos son más largas que en la plaza, el torero la torea y la torea, y después de aquel viene otro y la continua toreando con suavidad y temple, acoplándose a la embestida de la becerra, hasta que el torero consigue que la becerra se acople a él, y cada vez más larga, más humillada, más honda, más templada para rematar los pases detrás de la cintura del torero.
Otro aspecto digno de tenerse en cuenta es el que la becerra no se marche a la pared, a las tablas, o lo que es lo mismo, que no se aquerencie en tablas. La faena de muleta debe realizarse en el medio de la plaza y si por cualquier circunstancia la becerra se va a las tablas tiene que salir de allí en cuanto se le llame. Los toros en la plaza se agotan antes, y si no son bravos tienen tendencia a buscar refugio en las tablas, a rajarse.
Por tanto las becerras que muestren este defecto en la tienta deben desecharse.
Tienen que tener en cuenta que a la becerra se la puntúa por Fijeza, Humillar, Desplazamiento, Repetir embestidas, Duración, Casta, Fuerza y Nobleza.
Para tentar bien una becerra es conveniente conocer bien el encaste a tentar. Hay que conocer bien, por ejemplo, el problema de las distancias que es fundamental en la tienta. Cada animal y cada suerte exigen su propia distancia, Es muy difícil que dos becerras de la misma ganadería puedan torearse de la misma manera.
Resumiendo el tentadero es el laboratorio del ganadero donde se analizan en profundidad varios puntos :
Casta : afán de lucha en la lidia.
Bravura : manifestar ese afán de lucha embistiendo en la lidia.
Nobleza : obedecer a los engaños si le haces las cosas muy bien. Ese es el toro o la vaca que busca el ganadero, con una base de fuerza y otra serie de condiciones, como la fiereza, el repetir, el humillar al máximo. Tres requisitos indispensables si tiene bravura y nobleza pero si le falta la casta llega un momento que abre la boca, se raja, etc.
También hay que tratar de no confundir el genio de la casta en el tentadero, hay que hilar muy fino para ello. Que una becerra tome cinco puyazos en pocos minutos y después se coma al torero, estupendo, pero de esas salen media docena en cada camada.
Luego están las de notable y las normalitas que de esas son las que más abundan, ahí, está la tienta y el ganadero.
El ganadero no debe mandar a otro, por mucha estima que tenga hacia él, para que realice un tentadero, por no poder estar, se cambiaría el criterio de valoración de los animales al igual que ocurre con los presidentes en las corridas de toros.
Es el ganadero el que tiene que aprender de sus errores en la selección, de ellos aprende, y aprende, para tener su criterio más propio, sus matices y sus cosas.
Espero poder intercambiar comentarios en el primer tentadero del 2011, con todos los que asistan al 1º Curso de Aficionados Prácticos, en Encina Hermosa.
Don Mariano, a alguna figura del toreo en épocas pasadas le he leído que bravura y nobleza son comportamientos difíciles de compatibilizar: si es brava no puede ser noble. Obviamente, y usted ha tratado de despejar, la terminología y el vocabulario taurino carecen de entendimiento y manejo "común" por parte del aficionado y no siempre se han explicado bien estos conceptos, y basta para que un ganadero hable de vaca brava pero noble para que un torero afirme que eso no se puede dar. Igual es un tema que podemos aparcarlo para el sábado 26, pero vamos a necesitar muchos sábados para hablar de los temas que nos ocupan.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte.
Por cierto, el novillero de la foto primera es Fabián Castaño de la Escuela de tauromaaquia de Madrid creo. Hará paseíllo en Valdemorillo el lunes en la novillada sin picar. Un chaval que además es buena persona.
ResponderEliminarFabio Castañeda, perdón.
ResponderEliminarDaniel :
ResponderEliminarEl día 26 discutiremos ampliamente. Para mí en mí encaste son totalmente compatibles, Bravura y Nobleza y se lo demostraré en el tentadero el día 26. Saludos.
Buen documento, pero me surge una duda. Si una becerra no cumple notablemente en el tentadero, pero viene de familia con nota ¿Se debe tener en cuenta la reata a la hora de hacer la selección? ¿Se la debe aprobar y no mandarla al matadero?
ResponderEliminarEstupendo relato de sus conocimientos D. Mariano, y como es natural son fruto de su experiencia, es un magnifico debate el que acaban ustedes de abrir, para mí es muy difícil opinar ya que en ocasiones se confunde el genio con la casta y la mansedumbre con la nobleza "Toro Tonto" pero lo que realmente me gusta es la combinación de casta, fuerza,bravura y nobleza entiendo que es lo máximo al menos para mí.
ResponderEliminarUn cordial saludo.
Para mi la casta es el trasmisor de la emoción (puede comportarse como un manso encastado - genio - o bravo encastado) y la nobleza la bondad del animal, cualidad que debe tener un toro de nota.
ResponderEliminarY esa emoción se transmite al máximo cuando el torero logra lidiar un toro de tal manera que sea la que el animal demande para poder ver esas cualidades de las que venimos hablando. Esa emoción puede ser más o menos bella en función de la embestida, con más nobleza y humillación y recorrido o por el contrario con más genio y saliendo con la cara alta, pero ambas provocan emoción y atención en la lidia. La emoción no son solo 3 naturales de cartel o un puyazo en el sitio, también lo es un ayudado por alto o un muletazo a media altura.
ResponderEliminarMariano le leido atentamente el relato de lo significa una tienta ,y despues de ello me resulta muy dificil ,la eleccion de una becerra ,pues me parece muy tecnico,aunque yo tengo claro lo que es casta,bravura,nobleza,creo que depende mucho quien esta tentado a la becerra,en fin es todo un mundo muy apasionante y para ello se requiere mucho mas conocimientos que el de un viejo aficionado
ResponderEliminar¡Otra lección magistral, don Mariano! Para mí hay un término taurino que sirve para denominar otro comportamiento y es el de "fiereza". La fiereza debería ser buscada y conservada como oro en paño en una ganadería, opino.
ResponderEliminarHay toros famosos como Bastonito, o Murciano, u otro de Guardiola Fantoni que toreó Barrera hace unos San Isidros -no recuerdo su nombre- que fueron calificados como "fieros" por algunos "palabreros" o "plumillas", y con un tono despectivo, cuando el hecho de que el toro se quiera comer al torero, el hecho de que salga un toro a una plaza con una casta desbordante es algo que sucede muy pocas veces, desgraciadamente. Claro que luego un toro así debe ser bien lidiado y bien picado; si no,sucede lo que suele suceder...
Un saludo.
Enhorabuena Don Mariano por su blog y gracias por dedicar parte de su tiempo (valioso tiempo, supongo) en permitir que nos asomemos a su ganadería y sobre todo por compartir con nosotros su experiencia y conocimientos. Nunca antes había comentado su blog, pero lo sigo desde hace tiempo.
ResponderEliminarRespecto a esta discursión, yo creo que es "Juanito" quien da de lleno en el clavo. El problema es confundir nobleza con tontuna. Yo creo que un toro puede ser bravo y noble, lo que no puede ser es bravo y tonto. Si consideramos que un toro es noble porque es un toro tontorrón, que va y viene sin más, entonces acabaremos concluyendo que la nobleza y la bravura son incompatibles.